El aprendizaje basado en problemas (ABP) y su aplicación en un ámbito multicultural
Agustín Parise, Julieta Marotta, Emiliano Buis y Ricardo Rabinovich-Berkman
El pasado 5 de abril se llevó a cabo un nuevo encuentro del Seminario Permanente de Investigación sobre Teoría del Derecho Internacional de la Antigüedad a la Actualidad (SEMPITHIDIA), organizado conjuntamente con la Secretaría de Investigación y el Departamento de Ciencias Sociales.
Bajo el título “El aprendizaje basado en problemas (ABP) y su aplicación en un ámbito multicultural”, disertaron Julieta Marotta (magíster en Derecho, Louisiana State University; doctora en Políticas Públicas, Maastricht University) y Agustín Parise (magíster en Derecho, Louisiana State University; doctor en Derecho, Maastricht University), que estuvieron acompañados por el profesor Ricardo Rabinovich-Berkman y el profesor Emiliano Buis.
En primer lugar, Ricardo Rabinovich-Berkman, director del Departamento de Ciencias Sociales, brindó las palabras de bienvenida y celebró la visita de los expositores. Al comienzo de su intervención hizo referencia al aprendizaje del derecho. “Cada vez nos damos más cuenta de antropología, de las miradas históricas, sociológicas, económicas, filosóficas, cada vez nos abrimos más a lo interdisciplinar”, sostuvo. “Hoy en día es imposible pensar en temas sociales, como son los temas jurídicos, sin encarar que vivimos en un mundo de diversidad, en un mundo multicultural”, concluyó.
Por su parte, Agustín Parise comenzó su exposición dando cuenta de los cambios que sufrió la educación superior en nuestro país y la región. Durante la segunda mitad del siglo XX, se experimentó una expansión del número de estudiantes que accedió a la educación superior en América Latina, motorizados por las necesidades sociales y económicas que demandaban trabajadores más calificaciones. “Las universidades se convirtieron en plataformas para la movilidad social de los miembros de las clases medias. Los abogados de la región comenzaron a ofrecer una composición más diversa a la luz del género y la etnia”, afirmó.
Por otro lado, también destacó las transformaciones que incidieron en la educación legal con advenimiento de la democracia: “La Constitución argentina obtuvo una posición dominante, junto con los tratados internacionales y el rol de la Corte Suprema. Los abogados deben ser entrenados para moverse a gusto en este hábitat, un lugar donde el respeto por la democracia, la constitución y el Estado de derecho deben coexistir”.
En este nuevo contexto, en ámbitos educativos de carácter multicultural, es fundamental el rol de los docentes. “Tenemos que motivar a los estudiantes y transmitir habilidades al mismo tiempo. (…) Los expertos también señalan que los estudiantes entrenados en un aula de composición diversa están mejor equipados para actuar en un entorno globalizado, por lo tanto, el elemento globalizado se debe preservar y respetar al incrementar los cambios”, aseguró.
En el campo de los estudios sobre educación legal, los académicos alertaron sobre la necesidad de replantear ciertos aspectos de la enseñanza del derecho, especialmente, en relación con la memorización y la evaluación. “Los expertos señalaron la necesidad de reducir la memorización y la necesidad de implementar evaluaciones mediante la aplicación y la reflexión. Un foro fundamental se encuentra en la revista Academia de esta casa de estudios”, manifestó. En ese sentido, enfatizó que si bien se está desestimando el modelo de la clase magistral, hace falta incorporar en mayor medida dinámicas y técnicas como las clínicas jurídicas, el role play, los métodos de casos y el aprendizaje basado en problemas. Sin embargo, “los miembros de la Facultad deben estar dispuestos a emprender el cambio”, remarcó.
A continuación, Julieta Marotta explicó las características del método basado en problemas que ambos emplean en sus clases en la Facultad de Derecho y Políticas Públicas de la Universidad de Maastricht, aunque aclaró que se trabaja en cursos de no más de catorce estudiantes. “El aprendizaje basado en problemas es un método de educación que confía en que el aprendizaje ocurre cuando el alumno participa activamente en el desarrollo del conocimiento”, afirmó.
El método de aprendizaje basado en problemas nació en los setenta en una Facultad de Medicina de Canadá y parte de los conocimientos previos de los estudiantes y la puesta en común con el resto del grupo. “El alumno pasa a ser el primer agente generador de conocimiento y pasa a ser un ente activo en su aprendizaje. El alumno no recibe respuestas, sino que genera sus propias respuestas. Este método de educación se enriquece en contextos multiculturales y multidisciplinarios”, planteó. De este modo, los estudiantes se preparan en tanto ciudadanos globales y se forman en el marco de valores de inclusión, diversidad y respeto, junto con habilidades de comunicación, expresión y razonamiento crítico.
Una vez que terminan los cursos, los propios estudiantes dan su opinión sobre los distintos métodos de educación, los docentes y los materiales de estudio. En base a estas devoluciones, se elaboran recomendaciones para el coordinador del curso.
Finalmente, Emiliano Buis destacó la pertinencia de discutir en relación con la multiculturalidad y los nuevos métodos de enseñanza y aprendizaje: “Somos cada vez más conscientes de que como profesores enfrentamos en el aula un ámbito que es multicultural en una cantidad de aspectos, no solo, tanto como en Europa que efectivamente hablan una lengua extranjera, que están ahí viviendo en un contexto diferentes de su contexto de origen, sino que vienen de distintas formaciones sociales y familiares”.