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Resumen
Luhmann califica a “la constitución como adquisición evolutiva” cuya novedad consiste en que en ella convergen dos tradiciones semánticas y se transforman viejos contenidos de sentido.
La primera de estas tradiciones (que aún se mantiene) refiere al concepto de estructura, a una conexión orgánica que mantiene unido al cuerpo social y político y que expresa una concepción de la temporalidad del derecho, que indica su vigencia. La segunda tradición, proveniente del derecho romano remite centralmente a la existencia de textos escritos.
En esa convergencia, la figura del contrato es clave, ya que funda la legitimidad del poder político, el ejercicio de la fuerza y las formas de su delimitación. Así la constitución es un texto jurídico que textualiza cuestiones políticas, trata jurídicamente problemas políticos, determina el orden político como orden jurídico.
El auxilio de Derrida es imprescindible para encarar un enfoque deconstructivista de las decisiones teóricas, prácticas, ético-políticas y jurídicas. |