Discurso pronunciado por la Dra. Silvia Nonna

Acto de colación de grado del día 26 de abril de 2019

Silvia Nonna

Silvia Nonna

Buenas tardes, ¿Cómo están? Bienvenidos a los que están aquí por primera vez. Señor decano, Dr. Alberto Bueres, Señor ministro, Profesor Finocchiaro, señores profesores, colegas, graduados.
Ustedes son los protagonistas de este evento.

Es siempre para mí un honor y una alegría poder compartir estas colaciones de grado, y hoy además tengo la alegría de poder dirigirles estas últimas palabras de las que no necesitan tomar apunte

Llegó el momento, en breve, van a estar recibiendo su título. Diploma que acredita que han terminado de manera completa y con éxito, la carrera que decidieron estudiar en esta facultad.

Soy desde hace dos años su Secretaria Académica y algo que me da muchísima satisfacción es que también desde hace muchos años soy profesora de esta casa y ansío seguir siéndolo por mucho tiempo. Yo soy abogada, y me siento muy orgullosa de serlo, y además ser egresada de esta Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Una facultad pública, democrática, pluralista, que se preocupa por formar profesionales comprometidos con los problemas y las necesidades de nuestro país y de nuestra sociedad.

Saben ustedes que estarán cruzando las puertas de este magnífico Salón de Actos llevando un título de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires. Una de las mejores universidades del mundo. Una de las cincuenta mejores facultades del mundo. Y es de las mejores del mundo por varios motivos. Por sus profesores, por las carreras de grado, por las carreras de posgrado, por el práctico profesional, por las actividades de investigación, por los servicios que se brindan, por la biblioteca, y podría seguir enumerando una lista muy larga. Pero fundamentalmente, es una de las más importantes por las y los estudiantes que aquí se forman, y por las y los egresados que nos representan; y ellos son ustedes.

Recibir este diploma es sin duda un honor y un privilegio. Pero también es un gran compromiso. En pocos minutos ustedes se van a comprometer a ajustar su conducta a los dictados de la moral, a respetar y hacer respetar la Constitución Nacional y las instituciones democráticas y republicanas, y ejercer su profesión sirviendo a la dignidad de la persona y los derechos humanos.
Estarán asumiendo el compromiso de ejercer una profesión orientados a la defensa del Estado de Derecho, que garantice y fortalezca la democracia. Que ayude a la constitución de una sociedad justa e igualitaria y que asegure la defensa de los derechos humanos.

Hoy se llevan un título que los habilita para ejercer su profesión. Título que sin ninguna duda les abrirá nuevas y muchas puertas. Guardarán sus títulos enrollados, otros los enmarcaran pero sin duda todos ustedes lo conservarán con responsabilidad y con muchos recuerdos. Título que sin duda es parte de su futuro. Llevan en ese título horas de estudio y dedicación, noches en vela, momentos felices, otros no tanto, va con ese título, cursos, exámenes, parciales, horas en la biblioteca, cafés en el bar. Y también representa ese título relaciones que entablaron, amistades que hicieron, ratos compartidos. En este están también sus familias, sus compañeros, sus amigos, algunos de los cuales están hoy acompañándolos. También sus profesores, los que les enseñaron a estudiar, a aprender, a investigar, a querer saber más y a querer la profesión. Sepan que están ahí también muchas y silenciosas tareas administrativas, de quienes con entusiasmo y dedicación llevan a cabo cuando se dedican a las inscripciones online, cuando tienen nuestras aulas limpias y acogedoras. Todos colaboran para que puedan llegar a tener este título que hoy se llevan.

Hoy están recibiendo sus diplomas una doctora, dos especialistas, un diploma de honor, tres traductoras, un traductor, una procuradora, noventa y tres abogadas y setenta y tres abogados. Si miramos la lista, de ciento setenta y cinco hay ciento una mujeres y setenta y cuatro hombres. Enhorabuena que esto sea así.

Tomarán ustedes distintos rumbos, se encaminaran a otros logros, recorrerán el apasionante camino del ejercicio profesional y se enfrentarán al enorme desafío de poner en práctica lo que aprendieron dándole su propia impronta, su visión, su dedicación. Serán profesionales independientes, corporativos, trabajarán en una empresa, serán funcionarios, serán legisladores, jueces. Sea cual sea el rumbo que sigan, nunca olviden que ustedes son egresados de esta facultad. Tampoco olviden que está siempre será su casa, vuelvan a la facultad para cursar algunas de las carreras de posgrado, lleguen al doctorado, al posdoctorado, vengan por más diplomas y anímense a la docencia. Sigan viniendo, recorran nuestros pasillos, sigan habitando nuestras aulas, sigan visitando las bibliotecas, sigan investigando, nunca dejen de estudiar y personalmente deseo que sigan creciendo en el aprendizaje, perfeccionándose y capacitándose, y por sobre todas las cosas disfrutando.

Aquí los esperamos. Aquí estamos los profesores que continuaremos con nuestra tarea, quienes nos ayudan desde los cargos administrativos, los no docentes, queda la biblioteca, queda el bar y quedan muchas ganas de seguir viéndolos.

Son ustedes egresados de la Facultad de Derecho de la Universidad de Buenos Aires y son parte de ella.

Sinceramente les deseo que se sientan orgullosos del título obtenido y de la facultad en la que estudiaron y de la que están egresando.

Aprendan a disfrutar de lo que hoy comienza. Sigan, investigando, estudiando, aprendiendo, capacitándose y enseñando.

Los esperamos.

Los felicito.

Y el aplauso para ustedes.