Discurso pronunciado por el Dr. Alberto Bovino

Acto de colación de grado del día 8 de abril de 2011

Alberto Bovino

Alberto Bovino

Buenos días a todas las personas que hoy llenan esta sala en este día de celebración.

Cuando empecé esta carrera no tenia idea de por que lo hacia, en tercer año mi profesora de penal Lucila Larrandart nos recomendó leer un libro de un ser humano como pocos. El libro era “Los limite del dolor” y ese ser humano como pocos era Nils Christie.

En unas pocas horas descubrí con total convicción una vez más que yo he venido al mundo a molestar. Eso me decían en la escuela desde antes de primer grado y con sorpresa que el Derecho Penal en general y el Derecho Penal en particular serían mis herramientas de trabajo a partir de ese momento. Este libro cambió mi vida para siempre.

Mi experiencia universitaria en esta Facultad desde ese momento fue algo extraordinario, fue un verdadero privilegio recibir de manera totalmente gratuita la mejor enseñanza legal de nuestro país con docentes de la talla de Mónica Pinto, Gladys Mackinson, Lucila Larrandart, Tute Baigún, Carlos Nino, Julio Maier, Raúl Zaffaroni, Elena Highton, Enrique Marí y tantos otros más.

Y un buen día nos graduamos, sí efectivamente obtuvimos el titulo de abogados y abogadas que hoy recibirán ustedes y fuimos arrojados al mundo de la vida real. ¿Y que aprendimos allí? ¿No se suponía que sabíamos todo? Lamentablemente, nos enteramos de que habíamos dejado de ser estudiantes en sentido estricto para desde entonces seríamos abogados estudiantes que debíamos adoptar una nueva metodología de estudio, lo que algunos llaman conocimiento y acción. Esto es: basta de simples lecturas aisladas de todo el mundo real, hora debíamos leer para hacernos inteligentes para trabajar, para operar sobre la realidad. Ningún cliente nos preguntaría jamás en que consiste la discusión sobre la causa de las obligaciones, cual es la naturaleza jurídica del camino de sirga o de quien es el animal que cruza herido al fondo vecino. Por supuesto, que siempre necesitaremos un excelente conocimiento de la Teoría Jurídica pero con ello no alcanza, sino que es apenas el principio. La explicación práctica de nuestros conocimientos teóricos nos advertirán de otra necesidad, la necesidad de aprender a comprender como operan un sinnúmero de variables extra jurídicas en un proceso legal cualquiera.

Sin embargo, esto no termina aquí, como dice Martín Abregú “la vida no termina en los códigos.” De hecho, la vida comienza donde terminan las leyes. El derecho, las leyes fueron la gran herramienta de progreso social en la segunda mitad del Siglo XX, pero ha perdido este protagonismo frente a las nuevas tecnologías. ¿Puede el derecho en este contexto volver a ser una herramienta de progreso social? Es un tema para que ustedes especialmente lo sigan pensando. Yo creo que sí, pero eso dependerá de muchos factores y especialmente de su responsabilidad como profesionales.

En primer termino, todos los abogados de su generación deben entrenarse para aprovechar al máximo el uso de las nuevas tecnologías. Pero no porque estas nuevas tecnologías sean buenas en sí mismas, sino por el potencial que tienen para permitirnos ser más creativos, mejores comunicadores y mejores abogados. Los blogs nos pueden dar muchísimas herramientas, y hablo de los blogs como la herramienta mínima, básica. Sobre todo nos enseñaran otra manera de generar y transmitir información y conocimiento, mucho más apropiada para sus futuros clientes que información escrita con tinta negra en un memo de papel.

Por ultimo, consideramos absolutamente indispensable incorporar al estudio y a la explicación del derecho de cualquier rama del derecho, los temas de los Derechos Humanos y los temas de género. ¿Por qué decimos en cualquier rama del Derecho? Porque ambos temas deben ser incorporados a la enseñanza del derecho como temas transversales. ¿Y qué significa transversales? Significa que no se trata de temas que se puedan aprender aisladamente en una materia con ese contenido temático, es decir, no basta cursar Derechos Humanos y no basta hacer un curso sobre el tema de Derecho y género. Por el contrario, se trata de temas que deben ser incorporados a la enseñanza de todas las materias de la carrera.

Finalmente y con esto acabamos, hay que aprender a ser de vez en cuando irreverentes no irrespetuosos. La frescura de muchas de sus ideas hará que se animen a realizar planteos por el simple hecho de que quienes los precedimos estábamos convencidos de que hay cambios y transformaciones que no se podían hacer y en realidad nunca sabremos que habría pasado si lo hubiéramos intentado. No repitan ese error. Cuando estén pensando en una cuestiona de este tipo, al levantarse a la mañana mírense al espejo y pregúntense: si no es ahora ¿cuándo? y si no somos nosotros ¿quiénes? Estas son algunas de la cuestiones que deberán enfrentar para ser actores del cambio social y ese ser actores del cambio social no se debe hacer pensando en lo que les pueda redituar a ustedes como individuos. Ello es lo menos que deben devolverle a la comunidad por haber tenido el honor de graduarse en esta Facultad gratuitamente. Muchas veces cuando charlamos con amigos o colegas de estos temas me suelen decir: “A pero vos pensas así por que sos un bicho raro”. “Si - les contesto - soy un bicho raro pero también soy un abogado” y todos ustedes también estimados colegas bienvenidos y felicitaciones.

Muchas gracias.