Interesante
resultó la mesa que, coordinada por
el Dr. Fargosi, compartieron el Dr. Hugo
Martini (director de la Fundación
Carta Política) y el Licenciado Adrian
Nador (coordinador de Medio Digitales de
UNA).
El
Dr. Hugo Martini aludió
a que ante el fantasma de la desconfianza
que sobrevuela la institucionalidad recientemente
la tecnología debería acudir
en ayuda. Mencionó que a las acusaciones
de corrupción y de incapacidad de
gestión, la desinformación
suma argumentos en contra del acercamiento
y la participación ciudadana. Para
el Dr. Martini, esa escasa participación
podría revertirse mediante la aplicación
de tecnologías de las que disponemos
pero que no utilizamos adecuadamente. En
pocas palabras, sintetizó su pensamiento
respecto a que, en lugar de la tecnología
de -por ejemplo- el voto electrónico
se sigue utilizando la "tecnología
del puntero".
En función de ir
incrementando la credibilidad en el sistema,
su propuesta es desarrollar un proceso paralelo
en el que puedan coexistir el sistema actual
y el electrónico, contemplando las
realidades regionales, realizando ensayos
en años no electorales.
También explicó
las bondades y ventajas desde lo económico
ya que, a modo de ejemplo directo, reveló
que la confección de 40 millones
de boletas electorales para un partido nacional
implica un gasto de mas de un millón
de dólares.
Por
su parte, el Licenciado Nador
hablo de la "desintermediación"
del proceso político, mediante la
relación directa del candidato con
el ciudadano, utilizando los medios digitales
-la WEB por ejemplo- como herramienta de
contacto.
También
aludió a que se puede llegar a diferentes
"nichos" que, anteriormente, se
hallaban muy segmentados y hoy pueden integrarse
a un proceso común de comunicación.
Citó
que en ocasión de un acto de su partido,
los asistentes al mismo estaban limitados
en el número por la capacidad del
espacio en el que se realizó, pero
que, ese mismo acto, en tiempo real, fue
observado por muchos miles de personas en
la WEB.
Naturalmente,
sumó su voz a la serie de oradores
que, con una visión crítica
pero esperanzada, tienen el convencimiento
de que, mediante la utilización de
las herramientas tecnológicas se
profundizará la participación,
la transparencia y sobre todo, la pertenencia
y la credibilidad, elemento que, en conjunto,
implican una clara y consistente posibilidad
de mejorar la calidad Institucional.
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