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Año XI - Edición 206 27 de diciembre de 2012

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Presentación de la Revista Jurídica de Buenos Aires 2011 en homenaje al profesor Andrés J. D’Alessio

  • Nota de Tapa

Con la organización del Departamento de Publicaciones, el 23 de noviembre tuvo lugar en el Salón Rojo de esta Facultad de Derecho la presentación de la Revista Jurídica de Buenos Aires 2011, en homenaje al profesor Andrés J. D’Alessio.

En primer lugar, la Decana Mónica Pinto expresó que “este homenaje de la Revista Jurídica es como raro, cómo le vamos hacer un homenaje de la Facultad a Andrés si Andrés es la Facultad. Es muy difícil disociar la imagen de Andrés D’Alessio de la de esta casa”. Además, recordó que durante su gestión como Decano (1994-2002) lo fue a tiempo completo y que supo capitalizar todo aquello que hicieron sus predecesores en el Decanato. Para Pinto, D’Alessio probablemente haya sido el primero que se encargó de abrir la puerta de esta Facultad a la modernidad. “Hay muchos D’Alessio y yo no se los voy a contar a ustedes: todos los que estamos acá tenemos algo de D’Alessio”, subrayó. Elogió también la enorme generosidad del ex Decano, como así también su particular personalidad, difícil de olvidar. Sobre el final de su intervención remarcó: “en un lenguaje muy poco académico, yo diría que fue un gran tipo, y que todos tuvimos la gran suerte de poder estar junto a él, y que por eso estamos hoy muy contentos de poder dejar aquí algún testimonio de Andrés D’Alessio en la Facultad de Derecho”.

Luego, Mauro A. Divito relató su experiencia como coordinador, junto a Mónica Antonini, de la Revista Jurídica de Buenos Aires 2011. Se mostró entusiasmado con la idea de haber podido reunir en una misma obra cálidos recuerdos de la persona de Andrés D'Alessio junto con doctrina de derecho penal de gran valor.

A su turno, Edgardo A. Donna explicóque si uno entiende al derecho penal como la evitación de la guerra, es decir, que las partes no tomen venganza, debería haber como los hay en otros países una concordancia entre la jurisprudencia y la doctrina. Para Donna, D'Alessio tenía muy en claro esto último. La jurisprudencia y la doctrina no deberían ir por caminos separados. Opinó que la doctrina empieza a hacer elucubraciones poco entendibles a veces para el común de la gente y la jurisprudencia empieza a fallar como en la Edad Media, esto es, caso por caso y sin una clara homogeneización de criterios. En otros países los temas son discutidos y se evoluciona progresivamente, además de que no aparecen innovaciones repentinamente injertados en la jurisprudencia, es decir, la jurisprudencia es previsible. Para Donna en la doctrina argentina no hay discusión racional, se emplean calificativos de un grupo al otro y entonces “aparecen iluminados que viajan, traen una doctrina y la aplican sin la discusión que tenía esa doctrina en el lugar de origen de la misma”. Entonces, esta parece forzadamente introducida dentro de alguna jurisprudencia que suele tomarla y que pocos la entienden. Sumado a todo ello, “algunos abusan del conocimiento del idioma alemán, entonces ponen hasta frases en alemán, lo cual hace que no lo entiendan ni la gente ni los otros jueces ni la partes”. Todo esto provoca que en la práctica en la Argentina el derecho no sea aquello que resuelve la guerra.

Juan José Ávila efectuó algunos comentarios sobre los aportes del filósofo alemán Jürgen Habermas, especialmente en su obra Facticidad y validez: sobre el Derecho y el Estado democrático de derecho en términos de teoría del discurso. Las ideas directrices de Habermas están inspiradas en la necesidad de revitalizar las formulaciones de la ilustración como proyecto liberador. Estas ideas liberadoras son tales en tanto se proponían poner coto a aquellas relaciones que hacen de los humanos seres humillados, oprimidos, desvalidos. Frente a un posterior pesimismo sobre el poder de la razón, Habermas procura reconstruir los contenidos preceptivos, liberadores de la modernidad ilustrada y rehabilitar a la razón devaluada poniendo especial énfasis en reivindicar para la discusión filosófica ámbitos como los valores en general, la justicia, la moral, el derecho, la política, la filosofía práctica, entro otros. Fue en la más frecuente y humana de las prácticas, la práctica comunicativa ejercitada en el uso cotidiano del lenguaje, en donde Habermas junto a Karl-Otto Apel encontraron los fundamentos para su proyecto reivindicador de la razón. En nuestra estructura de emisiones de actos de habla se halló el reservorio de racionalidad que necesitaban. “Y es que cuando se emiten actos habla, desde los más pedestres hasta los más elevados, […] se pone en marcha un mecanismo que culmina abriendo camino a la razón”, argumentó.

Por último, Mónica Antonini comentó algunas de sus experiencias en torno a la coordinación de este nuevo número de la Revista Jurídica de Buenos Aires. Por otro lado, presentó un video en el que quedó reflejado lo que Andrés J. D'Alessio significó para ella.

En esta nueva edición de Revista Jurídica de Buenos Aires escriben: Guillermo R. Moncayo, Mónica Pinto, Luis Lozano, Eugenio R. Zaffaroni, Jaime Malamud Goti, Elizabeth A. Marum, Guillermo Ledesma, Hortensia D. T. Gutiérrez Posse, Ricardo Gil Lavedra, Javier Augusto De Luca, Maximiliano Rusconi, Pedro J. Bertolino, Mónica Antonini, Juan José Ávila, Edgardo Alberto Donna, Santiago Vismara, Ivana Bloch, Enrique Bacigalupo, Mario Gustavo Costa y Mauro A. Divito.

[…] todos tuvimos la gran suerte de poder estar junto a él y por eso estamos hoy muy contentos de poder dejar aquí algún testimonio de Andrés J. D'Alessio en la Facultad de Derecho”, indicó la Decana Mónica Pinto