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Año VII - Edición 133 30 de octubre de 2008

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I Congreso Internacional sobre Solución de Controversias

  • Nota de Tapa

Con el objetivo de promover la mediación y otros métodos de resolución de conflictos  y facilitar el intercambio de experiencias concertadas en diversos países, la Academia Interamericana de Derecho Comparado organizó, durante los días 14, 15 y 16 de octubre, el I Congreso Internacional sobre Solución de Controversias. El acto de apertura, celebrado 14 de octubre en el Salón Rojo de la Facultad de Derecho, contó con la presencia de los Dres. Diego Sánchez, María Quintana y Alberto Alvarellos y fue la ocasión para la pronunciación de la conferencia magistral “La mediación en la Argentina en los albores de siglo XXI”, a cargo de la Vicepresidente de la Corte Suprema de Justicia de la Nación, Dra. Elena Highton de Nolasco.

“La sociedad se encamina hacia nuevos modos de administrar justicia y el papel del juez va cambiando, con nuevos desarrollos”, expresó en primer lugar la Dra. Highton de Nolasco. Luego, opinó que en la mediación en el siglo XXI, la cuestión pasa por la formulación de políticas de Estado del Poder Judicial en materia de resolución alternativa de disputas. Asimismo, afirmó que, en aras de asegurar un acceso efectivo a la Justicia, los argentinos debemos ser líderes en el marco regional. De esta manera, indicó que “estamos colaborando con todos los poderes judiciales de los países de América Latina, con el modelo argentino de mediación, creado a partir del modelo de la escuela judicial americana.

Seguidamente, opinó que el acceso a la Justicia hoy no está disponible, sino que existe sólo una posesión teórica de facultades, así como también que, a efectos de no dejar vacía la democracia y saciar la necesidad de justicia y seguridad jurídica, se hace menester la aplicación de políticas de transformación en todos los niveles de la organización social.
Por otra parte, reconoció que se transita una era en la que los Tribunales se encuentran bajo la lupa de los ciudadanos, situación frente a la cual es necesario preguntarse acerca de la misión de jueces y tribunales. En este sentido, reflexionó que no es posible pensar en la resolución alternativa de disputas si no tenemos en cuenta los valores asociados a la institución y la búsqueda de respuestas creativas que acometan los problemas reales que tenemos.

A continuación, consideró que la promoción de la resolución alternativa de conflictos no implica, de modo alguno, mengua del tradicional sistema de administrar justicia, el dictado de la sentencia en los casos que haga falta; por lo cual tampoco resulta un modo de privatizar la Justicia. “Pensamos un servicio brindado y controlado en su calidad por el Estado”, adicionó. También sostuvo que ha quedado demostrado que el postulado tradicional según el cual cada agravio merece una intervención jurisdiccional no es cierto ni responde a criterios de bienestar en una sociedad democrática.

Posteriormente, entendió que se plantea un desafío y que para afrontarlo debemos ser sinceros, creativos y valientes. “Sinceros, porque es necesario decir cuáles son los problemas del sistema de justicia en su conjunto; creativos, porque las oportunidades hay que verlas; valientes porque lo más fácil es seguir haciendo lo que hasta ahora, pero se necesita audacia para cambiar las cosas”.

En otro orden de ideas, entendió que, dado que siempre hay una escasez de recursos para satisfacer las demandas de justicia, no puede seguirse dando una oferta homogénea, porque desemboca en que vayan entrando al sistema más casos, más jueces y más conflictos. En consecuencia, estimó inconveniente establecer una sinonimia entre conflicto y litigio; y propuso buscar soluciones heterogéneas dentro de los cuales la resolución alternativa de conflictos es la base del acceso y la protección ciudadana.

Entretanto, afirmó que es idea de la Corte Suprema de Justicia de la Nación que cada juez argentino asuma un rol de liderazgo en el acceso a justicia, lo que ha sido lanzado como una política judicial. Hacia el final de su ponencia, la Dra. Highton de Nolasco promovió la actuación sobre la demanda de los conflictos, la simplificación de los procedimientos y la búsqueda de resultados y soluciones, que no necesariamente dependerán de una sentencia judicial. “La mediación y la política pública de mediación es la que va a prosperar en el siglo XXI”, finalizó.

Durante los días 15 y 16 de octubre se desarrollaron los siguientes paneles:
Conflictos internacionales. Mediación. Arbitraje; Mediación y conflicto penal; Justicia alternativa del Estado de Jalisco, México; Responsabilidad de los jóvenes ante el delito. ¿Penas o medidas?; y Multipuertas: una mirada hacia el futuro.