Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
Miguel Ángel Maza, Alain Supiot, Alberto Barbieri y Alberto J. Bueres
Miguel Ángel Maza, Alain Supiot, Alberto Barbieri y Alberto J. Bueres
Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
Adrián Goldin
Adrián Goldin
Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
Alain Supiot
Alain Supiot
Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
Entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot
El pasado 21 de octubre tuvo lugar en el Salón Rojo la ceremonia de entrega del doctorado honoris causa de la UBA al profesor Alain Supiot.
El acto lo presidieron el rector Alberto Barbieri, el decano Alberto J. Bueres, el director y subdirector del Departamento de Derecho del Trabajo y la Seguridad Social, Miguel Ángel Maza y Juan Pablo Mugnolo, y el profesor Diego J. Tula.
La laudatio académica estuvo a cargo de Adrián Goldin (profesor emérito de la UBA), tras la cual Alain Supiot brindó su conferencia magistral de investidura, titulada: "Homo Faber: el trabajo en la edad del antropoceno".
Adrián Goldin realizó un breve recorrido por la trayectoria del homenajeado. “Tras obtener su doctorado en derecho en la Universidad de Bordeaux, en 1979, fue sucesivamente profesor en las universidades de Poitiers y Nantes y miembro senior del Instituto Universitario de Francia a partir del 2001. En el año 2012 fue elegido profesor del College de France”. Allí ocupó la titularidad de la cátedra a la que impuso el nombre de “Estado Social y mundialización. Análisis jurídico de las solidaridades”, evidencia del núcleo de preocupaciones sociales e intelectuales.
Por otro lado, afirmó que es miembro correspondiente de la Academia Británica y doctor honoris causa de la Universidad Católica de Lovaina en Bélgica y de la Universidad Aristoteles de Tesalónica, en Grecia. Asimismo, fue presidente de 1998 al 2000 del Consejo Nacional de Desarrollo de las Ciencias Humanas y Sociales de Francia e integra desde 2014 el Consejo Estratégico de la Investigación. En el ámbito de la Universidad de Nantes, fundó en 1993 la Casa de Ciencias del Hombre Ange Guépin, y en 2008 el Instituto de Estudios Avanzados de Nantes. Últimamente, fue designado miembro de la Comisión Global sobre el Futuro del Trabajo de la Organización Internacional del Trabajo.
Luego se refirió a la producción académica de Supiot. Escribió once libros, dirigió y participó en numerosas obras colectivas, escribió 75 artículos en francés, además de recensiones, entrevistas, prólogos. “Su ideas implicaron un impacto de lo más significativos en el pensamiento contemporáneo en el campo del derecho social, en sus fundamentos y en su comprometida aproximación al entorno económico, social e ideológico en el que ese ordenamiento se despliega”, sostuvo.
Por otro lado, recordó el grupo de investigación pluridisciplinaria de la Comisión Europea que Supiot dirigió encargado de analizar las transformaciones del trabajo en Europa y su incidencia sobre el derecho del trabajo: “El producto de ese emprendimiento, conocido como Informe Supiot y publicado luego por Flammarion bajo el título de Más allá del empleo, planteó la necesidad de oponer a la discontinuidad de las carreras, la necesidad de asegurar la continuidad del estado profesional de las personas y, por consiguiente, de la atención de las necesidades de tutela del trabajador trascendiendo la diversidad de situaciones por las que debe atravesar”.
En relación con sus postulados teóricos señaló que una de sus preocupaciones centrales es el Estado Social, categoría que presupone la protección de la persona y del trabajo humano. “Como sucediera en nuestro país, también en los europeos ese derrotero tutelar tiene su instancia inaugural en el tratamiento de los accidentes de trabajo. Con su habitual elocuencia crítica, Supiot evoca la indemnización de los accidentes del trabajo como el precio que hubo de pagarse por el tratamiento de los desechos humanos de la actividad industrialˮ, indicó.
Finalmente, el expositor reconoció que Supiot asume la responsabilidad de renovar y profundizar las reflexiones contemporáneas sobre la justicia social a partir de la Declaración de Filadelfia. “Es precisamente a la Justicia Social a la que dedica su libro sobre El Espíritu de Filadelfia, que sigue reinando para todos aquellos que no han renunciado a un mundo ideal en el que todos los seres humanos, independientemente de su raza, sus convicciones o su sexo, tienen el derecho de perseguir su progreso material así como su desarrollo intelectual en libertad, dignidad, seguridad económica e igualdad de oportunidades”, concluyó.
En su conferencia magistral, el profesor Alain Supiot abordó el análisis jurídico de las transformaciones contemporáneas del trabajo. En particular, hizo hincapié en cómo el impacto de la revolución tecnológica y la crisis ecológica global obligan a reconsiderar la concepción del trabajo de las sociedades contemporáneas y ponen en cuestión la arquitectura jurídica del Derecho del Trabajo.