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Año XVI - Edición 281 06 de abril de 2017

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Carl Lutz y la Casa de Cristal. Homenaje a un héroe suizo poco conocido

  • Nota de Tapa

Del 15 al 29 de marzo en el Hall de Pasos Perdidos se desarrolló la exposición “Carl Lutz y la Casa de Cristal. Homenaje a un héroe suizo poco conocido”. La inauguración de la misma tuvo lugar en el Salón Rojo el 15 de marzo, en el marco de la Presidencia suiza 2017 de la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto (IHRA) y de la sesión de enseñanza en Derechos Humanos organizada por la Facultad de Derecho y el Instituto Internacional de los Derechos Humanos Fondation René Cassin (Estrasburgo, Francia).

En este contexto, la decana Mónica Pinto afirmó que la Facultad de Derecho tiene un recorrido en el tema de los derechos humanos y la no discriminación y que actos como este son de gran importancia. Asimismo, recordó que a inicios de los ‘80 se pensó que la formación de los abogados tenía que incluir el respeto de la libertad y la dignidad de todas las personas en condiciones de igualdad sin discriminación. “La decisión de formar abogados con criterios de derechos humanos permitió que la Facultad de Derecho tuviera el privilegio de ser la productora de los primeros hombres y mujeres que en democracia tomaron la posta respecto de las organizaciones no gubernamentales dedicadas a la defensa de los derechos humanos”, sostuvo.

Luego, Hanspeter Mock, embajador de Suiza, realizó los correspondientes agradecimientos y recordó que su país preside en este año la Alianza Internacional para la Memoria del Holocausto, “nuestro objetivo es mantener el recuerdo de los crímenes cometidos por el régimen nacionalsocialista en contra de las poblaciones judías, rom, sinti y tantas otras minorías o personas que pensaban diferente”. Adicionó que, al dirigirse especialmente a las nuevas generaciones, “pretendemos tender un puente entre pasado, presente y futuro”.

A su turno, Claudio Avruj, secretario de Derechos Humanos y Pluralismo Cultural de la Nación, hizo alusión al valor de este tipo de actos. “No porque pase el tiempo estos actos dejan de tener importancia”, manifestó y consideró que los hechos de la historia permanente vuelven hacia nosotros, “toda vez que nosotros no sepamos enfrentarlos, resolverlos, y en este caso, dar testimonio”. Entendió, también, que “a mí me tocó estar en muchos homenajes a Justos de las Naciones a lo largo de mi trayectoria, y en todos los casos en los que hemos homenajeado diplomáticos hay un denominador común que es que fueron desconocidos, denigrados, por la misma diplomacia de su país y reconocidos muchos años después de su muerte”.

Ariel Cohen Sabban, presidente de la Delegación de Asociaciones Israelitas Argentinas (DAIA), recordó que Lutz nació en Suiza, en el seno de una familia cristiana. “Fue el primer diplomático neutral en Budapest en rescatar judíos. Se desempeñó como vicecónsul de la delegación diplomática suiza durante la Segunda Guerra Mundial”, desarrolló. Añadió que en negociaciones duras entre los nazis y el gobierno que ocupaba Hungría, Lutz consiguió el permiso para emitir una carta de protección de 8000 judíos. “Debido a sus acciones, la mitad de la población judía de Budapest sobrevivió y no fue deportada a los campos de exterminio nazi durante el Holocausto”, explicó.

Agnes Hirschi, hija adoptiva de Carl Lutz, realizó los correspondientes agradecimientos y expresó su satisfacción por este evento. Asimismo, compartió relatos, en los que recordó la labor de Carl Lutz. Hirschi manifestó que nada pudo detenerlo de desarrollar su carrera de diplomacia y convertirse en un héroe. “Nació en 1985 en Walzenhausen, en un pequeño pueblo al este de Suiza en una familia de 10 hijos, él era el segundo más joven”, describió. Más tarde, resaltó: “Él quería salvar la mayor cantidad de vidas judías posibles”. Además, señaló que el procedimiento que Lutz tomó para salvar las vidas no seguía las políticas de Suiza pero le dio la posibilidad de salvar miles de judíos.

Tras esto, Alejandro Finocchiaro, embajador de Argentina ante la IHRA, señaló que “hablar del Holocausto en primer lugar trae hablar de muerte y oscuridad, hablar de muerte en su forma más refinada, hablar de la muerte preparada en forma sistemática, sin sentido, con el objetivo de exterminar a un colectivo”. Pero también “nos hemos acostumbrado a que hablar del Holocausto sea ver las luces que nos ha dejado y el ejemplo de Carl Lutz es hablar de aquellas personas que jugaron su vida para ayudar al otro”. 

Podes ver parte de la muestra plástica que hubo en el Salón de Pasos Perdidos aquí.