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Año XV - Edición 276 03 de noviembre de 2016

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Ayotzinapa: la experiencia del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos

  • Nota de Tapa

El 25 de octubre en el Salón Verde el Centro de Derechos Humanos (CDH) y el Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) convocaron a un encuentro con Carlos Beristain y Claudia Paz y Paz, miembros del Grupo Interdisciplinario de Expertos Independientes (GIEI), quienes expusieron sobre el trabajo realizado en el caso Ayotzinapa.

El grupo fue creado por la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en 2014 junto con el Estado Mexicano y representantes de los 43 estudiantes desaparecidos en la escuela normal rural Raúl Isidro Burgos de Ayotzinapa, en Guerrero. Fue conformado para acompañar la investigación de los crímenes y de sus responsables, la búsqueda de los desaparecidos y la atención a las víctimas y familiares, así como para emitir recomendaciones al Estado Mexicano. El resultado de su trabajo fue condensado en dos informes publicados por el GIEI, en septiembre de 2015 y en abril de 2016.

Para comenzar, la decana Mónica Pinto pronunció los correspondientes agradecimientos y destacó la presencia de Paz y Paz y de Beristain. “El procedimiento del Grupo Interdisciplinario es algo novedoso dentro del campo de los procedimientos de derechos humanos. Esto es el producto de una acuerdo entre el gobierno de México y la Comisión Interamericana de Derechos Humanos”, describió. Añadió que sin perjuicio de que el grupo tenía tareas específicas con lo que había sucedido en Ayotzinapa, “aquí hay un marbete más grande, que es la lucha contra la impunidad, lucha contra la impunidad que el sistema interamericano comenzó temprano”.

Luego, Gastón Chillier, director ejecutivo del CELS, brindó algunas palabras introductorias. Acto seguido, Carlos Beristain resaltó que su trabajo proviene de un acuerdo entre el estado y las víctimas para poner en marcha un mecanismo novedoso. “Se trata de medidas cautelares. Para que un caso llegue a la Comisión Interamericana como un caso contencioso tienen que pasar muchos años, hasta que se agotan los recursos internos. Nuestro mecanismo viene de medidas de protección de la vida de los desaparecidos, medidas cautelares urgentes”, resaltó. Comentó que el grupo realizó una investigación y trabajó con las víctimas. Entre las cuestiones significativas, Beristain mencionó que se hizo énfasis en que el dolor de los familiares de los desaparecidos debe ser escuchado, porque solo cuando se tiene cierta conciencia de este dolor se puede tener la empatía necesaria para movilizar la energía y hacer una transformación de la investigación. “Estamos hablando de un caso que tiene que ver con derechos humanos y crimen organizado”, consideró. El orador afirmó que las versiones que se habían construido sobre la historia no eran ciertas. “Los jóvenes no viajaron a la ciudad de Iguala a boicotear un acto político del alcalde Abarca (…). Hay dos cosas que muestran que esto no es cierto. En primer lugar, los jóvenes estaban siendo monitoreados mucho tiempo antes de llegar a la ciudad de Iguala y por otra parte los jóvenes no iban armados, todos los disparos en los buses eran de afuera hacia adentro”, profundizó.

Tras esto, Chillier le preguntó a Claudia Paz y Paz sobre si se puede proyectar desde el informe problemas estructurales en las violaciones que están sucediendo en México y cuáles son las recomendaciones. Frente a esto, Paz y Paz aseveró que fue una experiencia de 14 meses trabajando en México que permitió documentar no solo las omisiones que se dieron en cuanto a la investigación del caso concreto. “La Subprocuraduría contra la delincuencia organizada también hablaba de fallas estructurales de la investigación de derechos humanos”, remarcó. Agregó que en este caso se trata de un ataque masivo, que duró más de cinco horas, que ocurrió en un radio de más de 180 kilómetros, que sucedió con el involucramiento directo de al menos dos policías municipales. “Encontramos muy fuertes indicios de participación de policía federal, de policía estatal, acerca de cuál es el rol de los militares, la participación de otra policía municipal. Me refiero a que es un hecho mucho más complejo que la decisión y locura de un grupo (…), es un hecho más complejo y sin duda se trata de una situación gravísima de violación de derechos humanos, pero tiene que ver con un contexto de crimen organizado en esa zona, contexto que se omitió en la investigación”, desarrolló Paz y Paz.