Presentación del libro Los múltiples aspectos del Trabajo infantil y Adolescente. Enfoques jurídico y pragmático
El pasado 7 de octubre, en el Salón Auditorio, se realizó la presentación del libro Los múltiples aspectos del Trabajo infantil y Adolescente. Enfoques jurídico y pragmático, organizada por el Departamento de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social. La profesora Liliana Hebe Litterio dirigió la obra.
Las palabras de apertura estuvieron a cargo del decano Leandro Vergara y Laura Cristina Castagnino (subdirectora del Departamento de Derecho del Trabajo y de la Seguridad Social, UBA). El profesor Mario Ackerman (profesor Emérito, Facultad de Derecho, UBA) participó en calidad de expositor.
Para comenzar, Leandro Vergara comentó sobre el rol que tiene el decano en las presentaciones de libros. “Es un gran orgullo y un gran acontecimiento, ver a profesores, ocupar sus horas para estudiar y escribir”, remarcó. Se refirió a la problemática actual del país, donde los/as niños/as se ven muy afectados/as. “Es un país cada vez más pobre, donde se ve que la doctrina necesita un cambio”, expresó.
En el marco de la presentación de la obra, Mario Ackerman introdujo una diferenciación de tipos de libros con varias categorizaciones. La primera, la denominó, un “libro de oportunidad” y ejemplificó haciendo referencia a una obra de la reforma laboral. Por otro lado, habló de la segunda categorización, que llamó “oportunos”. “Aparecen en el momento del suceso que tratan”, indicó. Y detalló las siguientes categorizaciones: libros necesarios e inútiles, individuales, plurindividuales y colectivas.“No es lo mismo que una plural, porque en la colectiva hay un sentimiento en común y no una suma de trabajos”, destacó. Sobre los/as destinatarios/as, le dedico la siguiente categorización. En primer lugar, mencionó al mismo/a autor/a, que escribe una obra para sí mismos/as. Luego, los libros que están destinados a ciertos lectores/as y por último los que están destinados a la sociedad. En otro orden, aludió al trato de la obra, dentro de una mirada teórica, realista y práctica, donde puntualizó en los libros técnicos, prácticos y teóricos. La principal crítica que le encontró a esta división, provino de una cita de Kant: “La teoría sin práctica es mera especulación y la práctica sin teoría es improvisación”. Esto lo llevó a describir en gran detalle los varios ejemplos dentro de esta categorización.
Arrancando con el análisis de la obra, una de las primeras adjetivaciones que le dio, fue que la misma es un libro “ómnibus”, la razón detrás de esto, fue que, si bien la obra puede enmarcarse dentro de la mirada de ciertos lectores/as, también está destinado a la persona que lo lee en un colectivo. Enfatizó que es un libro para todos/as. “La obra presenta la problemática del trabajo infantil para cualquiera que quiera un análisis y una propuesta de cambio”, sostuvo.
Cerró su presentación con una reflexión, destinada a las personas que están transitando por la academia. Aquí confesó, sobre la ansiedad y nervios qué siente uno con la escritura. “Eso no se pierde nunca, porque es la obra propia y es lo que queda”, reflexionó. No obstante, compartió una advertencia. “Uno no debe apurarse y avanzar hacia el otro, porque todo lo bueno lleva tiempo”, manifestó. Concluyó entonces, que cualquier escritor/a, debe siempre, aceptar la crítica. “Siempre que la misma venga de buena fe y que la persona esté dispuesta al diálogo”, aclaró.
Liliana Hebe Litterio brindó una serie de agradecimientos, se dedicó a comentar sobre el libro en sí y explicó cómo surgió la idea de la obra. Una de las razones fue el trabajo infantil. Aquí explicó cómo la propia naturaleza del tema es desgarradora y era necesario el trato con un grupo de investigadores. “Muchos no habían escrito académicamente y menos investigado”, expresó. Volvió entonces al tema de la obra: “No se trata en profundidad”. Y planteó que la principal razón detrás de esto es el dolor que provoca. “Se repasa y se deja ir”, señaló. Sobre el libro en sí, puntualizó que no es una agrupación de artículos, todo lo contrario. “Fue un libro que fue planeado, metódicamente, hasta el último detalle”, destacó. Como conclusión aludió a la necesidad de que la sociedad actúe sobre estos temas.