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Año XV - Edición 277 17 de noviembre de 2016

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Mediación penitenciaria

  • Notas

El pasado 27 de octubre se realizó otro encuentro del Seminario Permanente del Centro de Estudios de Ejecución Penal, dirigido por Leonardo Pitlevnik. En esta oportunidad, la conferencia versó sobre la mediación penitenciaria y estuvo a cargo de Cecilia Toro. En primer lugar, la oradora se refirió al paradigma de la prisión “con esa cantidad de individuos que están pero que al mismo tiempo no están porque los invisibilizamos dentro de esos muros, por segunda vez. Porque los que llegan a prisión, en mayor porcentaje, son los que afuera tampoco vemos y que son esos porcentajes abrumadores de excluidos que nuestras sociedades contemporáneas y de descarte humano ha ido involucionando ante esta segunda forma de exclusión que no es ni más ni menos que la prisión”. Luego, expuso que los índices de violencia de nuestras prisiones latinoamericanas, en general, y, en Argentina en particular, son abrumadores. “La violencia se genera por cuestiones muy pequeñas, cotidianas y salvables”, observó. Para encontrar una salida a esta violencia, Toro pensó en la mediación penitenciaria, que es “un instituto muy válido de investigar acá, sobre el que hay muy poco escrito y así ver qué instrumentos teníamos como para que esto pudiese empezar a funcionar”, contó. En la misma línea, explicó que la mediación penitenciaria quiere decir mediación intramuros.

Por otra parte, señaló que las Reglas de Mandela hablan específicamente de la mediación penitenciaria “y, si bien es cierto que las Reglas de Mandela no tienen carácter vinculante para nuestro país como ocurre con los tratados o con las convenciones, sí tiene el peso y la autoridad del organismo de quien emanan entonces sin duda se constituyen en una directriz que debemos seguir y a la que debemos ajustarnos”, resaltó.

Más tarde, señaló que la mediación se trata de la gestión pacífica del conflicto, de la intervención de un tercero que sirva precisamente de árbitro en ese dialogo y que tiene un carácter eminentemente restaurativo. Dentro del ámbito penitenciario, enfatizó Toro, no podría ser jamás mediador penitenciario alguien que forme parte del sistema penitenciario, siempre tiene que ser alguien extrapenitenciario. Sobre este tema, hizo referencia a que en España hay un cuerpo colegiado de mediadores en los centros penitenciarios constituidos por asistentes sociales, psicológicos, abogados y se van alternando en la solución de conflictos.