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Año XII - Edición 218 26 de septiembre de 2013

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La profesión de intérprete de conferencias en el ámbito internacional

  • Notas

El Centro de Graduados y el Departamento de Traductorado Público organizaron conjuntamente esta jornada que tuvo lugar el pasado 30 de agosto con la participación como expositor de Daniel Giglio, quien compartió sus experiencias en el exterior interpretando conferencias.

De tal modo, Giglio recordó los inicios de su vocación, indicando que si bien no ha tenido una familia vinculada con los idiomas extranjeros, desde una edad temprana profundizó en el estudio del idioma. Se recibió de abogado y traductor en esta Facultad y, posteriormente, realizó una Maestría sobre interpretación en Monterrey.

Comentó entonces el mercado de interpretación de conferencias en Estados Unidos. Así, indicó que la Organización de las Naciones Unidas cuenta con un sistema de intérpretes de planta de todos los idiomas oficiales. Además, precisó que en Estados Unidos se puede trabajar como intérprete en Nueva York, Miami, San Francisco y Washington. En tal sentido, señaló que en esta última ciudad el expositor trabaja como intérprete de conferencias, ya que es eminentemente institucional, teniendo en cuenta que se encuentran organismos internacionales que tienen muchas reuniones, como la Organización de Estados Americanos, el Banco Mundial, el Fondo Monetario Internacional, el Banco Interamericano de Desarrollo y la Corporación Financiera Internacional.

También hizo referencia a otros tipos de interpretación. En este orden de ideas, aludió a los intérpretes comunitarios para entrevistas; los intérpretes de enlace que trabajan en hospitales, entre pacientes y médicos; la interpretación telefónica; el intérprete judicial afectado a un tribunal, remarcando que el tribunal cuenta con una lista y eligen a los que necesitan para una audiencia. A su vez, mencionó que los dos idiomas para la interpretación judicial federal son el polaco y el español. Destacó la mayor capacitación en interpretación que existe en Estados Unidos, subrayando el nivel de las escuelas de interpretación de Europa.

Seguidamente, analizó a los intérpretes de conferencias, comentando los orígenes de la interpretación. En cuanto a los intérpretes multilingües, resaltó la cultura del idioma y el pluriculturalismo. También se refirió a la personalidad de los intérpretes, a las cuestiones administrativas para emigrar a Estados Unidos y a la ética profesional.

Consideró, asimismo, que los intérpretes de conferencias son intermediarios entre un idioma o una serie de idiomas y otro. Clasificó a la interpretación como simultánea, consecutiva o de susurro. Como características personales del intérprete, enfatizó el conocimiento de uno más idiomas y las culturas, la capacidad de comunicación, la capacitación, la dedicación del tiempo, la buena predisposición y la duda metódica, es decir, averiguar por qué las cosas son así.

Además, brindó una clasificación lingüística, explicando que el idioma A es el nativo del intérprete o el que el intérprete considera su idioma nativo; el idioma B es al que el intérprete interpreta y del que el intérprete interpreta; y el idioma C es considerado como un idioma pasivo del cual se interpreta pero no al que interpreta. Respecto a las cabinas, marcó que aquellas de inglés, portugués, francés al español se denominan cabinas puras, mientras que aquellas en las que se efectúa la interpretación de idioma A a B y viceversa, se denominan cabinas bidireccionales. De esta manera, observó que en las reuniones en organismos internacionales se contratan a intérpretes multilingües con cabinas puras y en cambio, las reuniones más pequeñas o informales permiten la bidireccionalidad.

Hacia el final, advirtió que la interpretación con el tiempo va a quedar con niveles muy altos o muy bajos en cuanto a masividad, como así también que los idiomas más importantes van a cambiar y que la traducción escrita va a crecer. “La profesión se ha democratizado porque el mundo se abrió y estamos todos conectados con todos”, concluyó.

“La profesión se ha democratizado porque el mundo se abrió y estamos todos conectados con todos”, expresó Daniel Giglio.