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Año XVI - Edición 280 23 de marzo de 2017

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La Antártida. Desafíos y perspectivas

  • Notas

El pasado 2 de marzo se realizó en el Salón Auditorio la conferencia “La Antártida. Desafíos y perspectivas”,organizada por la Cátedra del Dr. Juan Antonio Travieso y el Departamento de Derecho Público II.

A modo de apertura, la coordinadora de la actividad, María del Pilar García Martínez, realizó una breve introducción. Luego, tomó la palabra Natalia López (encargada del Proyecto Antártida Educa de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Argentina), quien se preguntó quién gobierna la Antártida con tantos países que tienen base. En este sentido, explicó que si bien es cierto que la Antártida tiene un montón de naciones con sus bases, que son como pequeñas embajadas de ese país, hay una ley que organiza. Por su parte, Francisco Bernal (funcionario encargado del Proyecto Antártida Educa de la Consejería de Educación de la Embajada de España en Argentina) planteó cómo se regula el uso de los drones en la Antártida. Tras la proyección de un video informativo, Bernal explicó que la cuestión fundamental es la importancia que tiene cada una de las personas que van allí. “Los científicos no podrían trabajar sino existe una ayuda por parte de los militares. Parece que son dos mundos muy lejanos pero en la Antártida son mundos que se están tocando constantemente porque sin uno, los otros no funcionarían bien”, remarcó. Acto seguido, José Luis Agraz (responsable de Información, Secretaría del Tratado Antártico) se refirió a la ventaja relativa que tiene Sudamérica con respecto a los otros continentes que rodean la Antártida, particularmente Argentina y Chile, ya que ambos países se encuentran a menos de 1000 kilómetros del norte de la Península Antártica. Por otro lado, contó que la Antártida tiene una superficie de 14 millones de kilómetros cuadrados que varían fuertemente entre verano e invierno con la extensión de las plataformas de hielo que rodean el continente.

A su turno, Pablo Wainschenker (editor de la Secretaría del Tratado Antártico desde 2005) se refirió al turismo en la Antártida. Para comenzar, explicó que trabaja en turismo hace muchos años y “al principio era un shock convivir en un barco de turismo con gente de todo el mundo y gente que tenía miradas sobre la Antártida que son muy diferentes a las que aprendemos nosotros en la escuela respecto de qué es la Antártida, quién tiene qué derechos y qué es lo que se puede o no hacer”.

Juan Antonio Travieso, por su parte,sostuvo que la Antártida tiene una historia apasionante. También se refirió a los capitanes de distintas expediciones para alcanzar el Polo Sur, una a cargo de Robert Scott y otra a cargo de Roald Amundsen.

Seguidamente, Fernando G. Tarapow (secretario técnico en el Servicio de Hidrografía Naval y Capitán de Fragata) relató sus experiencias en la Antártida. “Lo más interesante, y esto tiene que ver también con la parte turística, es que los buques militares antes de cruzar el pasaje de Drake, que es esa gran masa de agua que nos separa del continente de la Antártida, es muy complicado cruzarlo porque hay mal tiempo cada dos o tres días (…) y las olas que atraviesa el buque lo hace en una posición muy desfavorable”.