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Año XXI - Edición 380 29 de septiembre de 2022

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Jornada en homenaje a los maestros del derecho político

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En el Salón Rojo, el pasado 15 de septiembre, se llevó a cabo una jornada en homenaje a los maestros del derecho político. Pablo Manili y Edgardo Costa realizaron la presentación del evento. A continuación, se desarrolló el primer panel en el cual se realizaron homenajes a Guillermo Molinelli, a cargo de Miguel Deluca; a Mario Serrafero, a cargo de Jorge Bercholc; aMario Justo López, a cargo de Mario Justo López (hijo) y a Tulio Ortiz, a cargo de Luciana Scotti y Viviana Albertus. Seguidamente, se realizó el segundo panel, yse prosiguió con los homenajes a Carlos Floria, a cargo de Mario Federici; a Héctor Orlandi, a cargo de Alejandra Lazzaro; a Fayt Carlos, a cargo de Christian Cao y a Resnik Mario, a cargo de Alejandra Pericola y Anibal D’Auria.

Primeramente, Pablo Manili compartió unas palabras de apertura: “Hemos decidido hacer esta jornada en homenaje a los grandes maestros fallecidos del derecho político. En algún momento estos grandes maestros sembraron la semilla que nos dejó esa inquietud de estudiar, de profundizar los temas. Considero que todos ellos merecen nuestro respeto y nuestro homenaje”. Seguidamente, Edgardo Costa, citó un discurso elaborado por Horacio Sanguinetti, director del Departamento de Derecho Público I: “Aunque no estén presentes, les debemos su sabiduría y la generosidad con que la transmitieron. Su capacidad sigue viva y al servicio de quienes aprovechamos de ella. Su talento sigue vigente. (...) Ellos nos enseñaron la libertad de pensar”.

En lo que atañe al primer panel, Miguel Deluca hizo referencia a Guillermo Molinelli: “No fue un tradicional maestro del derecho político, a sus estudios les daba una impronta eminentemente de estudios empíricos de las instituciones políticas”. Asimismo, mencionó como sus obras más destacadas: Colegios electorales y elecciones presidenciales en la Argentina; Funcionamiento del Congreso; Clase política y reforma electoral y Congreso, presidencia y justicia en la Argentina. “A través de estas obras podemos ver su interés en el derecho político. Su foco eran las instituciones políticas, particularmente, el Congreso y los sistemas electorales y sus consecuencias políticas”. A su turno, Jorge Bercholc recordó aMario Serrafero: “Mario se puede incluir junto con Guillermo en una nueva perspectiva de ver a la materia en lo que históricamente se llamaba derecho político, es decir, una perspectiva más histórica, filosófica. Fue un pionero en el área de estudios presidenciales”. De esta manera, entre sus libros identificó: Reelección y solución presidencial; El poder y su sombra y Exceptocracia con el fin de la democracia y otras categorías vinculadas. Luego, retomó el interrogante: ¿Existe realmente el presidencialismo o el hiperpresidencialismo latinoamericano?. A continuación, Mario Justo López (hijo) homenajeó a su padre, Mario Justo López: “Fue treinta y tres años profesor en esta casa. Eso es lo más importante. En general, lo que más se cita de él son las definiciones de las palabras, era uno de los temas que más le preocupaban. A él no sólo le importaba el desarrollo de la ciencia política y el ejercicio conceptual sino también la difusión. La docencia es lo que más le gustaría a él recordar. Fue un entusiasta participante de la transformación pedagógica de la Facultad”. Finalmente, Luciana Scotti y Viviana Albertus comentaron sobre Tulio Ortiz: “Se recibió investigando sobre la historia argentina.. No sólo quiero recordarlo por su labor profesional y académica, sino también por su don de gente, su calidad de persona. Ahora nos toca a los jóvenes mantener a la Facultad de Derecho como protagonista de la historia argentina, tal como nos enseñó el maestro Julio Ortiz. Y agregaron: “Era el historiador de la Facultad de Derecho. Tenía un gran interés por la historia de nuestro país. A partir de sus obras, la primera en el año 2011, Facultad de Derecho, historia, nación y universidad, cada año hubo una obra. Finalmente, su último libro fue sobre la Facultad hacia su bicentenario”.

En cuanto al segundo panel, en primer lugar, Mario Federici expresó sobre Carlos Floria: “Referirse a Carlos implica recordarlo como una persona exquisita. Su trayectoria fue multifacética. La Ciencia Política fue la disciplina que mejor cultivó y en la que contribuyó a modernizar programas de estudios de distintas universidades. Fue un intelectual preocupado y comprometido con la realidad política argentina. Se destacó como uno de los pensadores y analistas de la política más influyente y respetado del país”. En segundo término, Alejandra Lazzaro conmemoró a Héctor Orlandi: “Una de sus características fue la adicción a la lectura. Entre sus obras más destacadas puedo mencionar: Principios de Ciencia Política y Teoría del Estado, El Poder Ejecutivo argentino y el federalismo, Estudios iniciales del derecho político, Política e historia constitucional argentina y El mandato imperativo y los partidos políticos. Nos dejó un legado que nadie pone en tela de juicio: su convicción republicana, la fe en las instituciones, su pasión por la política y su devoción por investigar y compartir los conocimientos con sus alumnos/as a quienes trató de difundir sus valores democráticos”. Por consiguiente, Christian Cao recordó aCarlos Fayt: “Se dice que una sociedad tiende a ser justa cuando además de atender a las nuevas generaciones, también homenajea la memoria de quienes nos han enseñado. Lo que nos enseñó Fayt hoy es aplicable incorporando los nuevos problemas y los nuevos desafíos que tiene el Estado contemporáneo. Tuvo una pasión por tres categorías: el ejercicio de la profesión, su vocación docente y su función en la Corte Suprema”. Y añadió que “el caso Fayt enseña una cuestión elemental que tiene que ver con el control, con el freno del poder, en este caso, respecto del poder constituyente. Esa sentencia tuvo la inteligencia de señalar un límite al poder incluso reformador de la Constitución”. Para finalizar, Alejandra Pericola y Aníbal D’Auria concluyeron en honor a Resnik Mario: “Aportó una perspectiva sistémica para el estudio del Estado. Entendía que el aporte de la teoría sistémica permitía ver al Estado en su relación con el mundo de manera dinámica e interrelacionada. Un gran aporte a la Teoría del Estado ha sido su modo de presentar y analizar las distintas perspectivas metodológicas para poder abordar el estudio del Estado. (...) Era un comprador compulsivo de libros. Se la pasaba haciendo chistes, se caracterizó por su humor”.