El delito de negacionismo
El delito de negacionismo
El pasado 26 de mayo tuvo lugar la actividad "El delito de negacionismo", organizada por el proyecto DECyT "Negacionismo y Derecho Penal" y con el auspicio del Programa Justicia y Memoria.
En esta ocasión, expuso Emanuela Fronza (Universidad de Bolonia, Italia), experta en Derecho Penal Internacional y Comparado. Fue investigadora principal del proyecto internacional "Leyes de la Memoria en Perspectiva Internacional y Comparada" y coordinadora científica de las "Clínicas de Derecho" en derecho penal internacional, Universidad de Paris 1-Sorbonne en Paris.
En primer lugar, explicó: “Cuando hablamos de negacionismo, por supuesto, y eso es un tema muy grande, hablamos de discriminación, hablamos de palabras injustas, hablamos de palabras odiosas. Y al mismo tiempo, hablamos también de la relación entre el Derecho, el juicio penal y el tiempo. Porque el tiempo y el proceso penal como espacio, como productor de memoria, el juicio penal que va produciendo una memoria, no la va consumando, va produciendo una memoria”. Acto seguido, destacó cuatro elementos: la importancia de la memoria, la expansión del Derecho Penal, el renacimiento de los delitos de opinión y las posibilidades y dificultades de las socials networks”.
Luego, describió brevemente la evolución del negacionismo: “En 1985, en una mesa de historiadores, sin juristas, se hablaba de negacionismo y era muy claro el fenómeno, estábamos hablando del negacionismo del Holocausto (…) A finales de los años 90, el término negacionismo significa algo más amplio, y al mismo tiempo es un delito, así que cambió mucho”. Por otro lado, comentó que “se transforma en un delito a nivel nacional y que va castigando solamente el Holocausto, después llega la Unión Europea, llega con exigencias político-criminales diferentes y dice que el negacionismo tiene que tutelar todos los Derechos Humanos”. Y sumó que “el delito de negacionismo va a ser objeto de una tensión por la Unión Europea, pero lo pone en un marco más grande, de discriminación, de protección de los Derechos Humanos y de la memoria común, y de una identidad europea”.
Posteriormente, y hasta el final de la ponencia, Emanuela Fronza respondió preguntas de los/as participantes del evento.