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Año XIII - Edición 237 25 de septiembre de 2014

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Cine y Derecho: el derecho en el cine ruso, desde la perspectiva de un actor

  • Notas

Organizado por el Departamento de Ciencias Sociales el pasado 22 de agosto se llevó a cabo en el Salón Verde de la Facultad la conferencia “Cine y Derecho: el derecho en el cine ruso, desde la perspectiva de un actor”, la cual estuvo a cargo de Anatoli Nemov, actor y profesor de la Universidad de la Cultura de Moscú.

En primer lugar, el profesor Ricardo Rabinovich-Berkman opinó que el cine ruso es uno de los mejores debido a que Rusia ha trabajado desde muy temprano el cine y con una profundidad notable. “Yo creo que una de las cuestiones que tenemos que fomentar en nuestra Facultad es la apertura mental, o sea, la predisposición a ver la realidad que nosotros trabajamos desde una óptica variada”, finalizó.

A continuación, Anatoli Nemov expresó que la cultura se basa lógicamente sobre la historia del país donde nace. De este modo, relató que la cinematografía comenzó en Francia en 1896 y seguidamente en Rusia en 1898. Rusia y Francia estaban muy unidas y juntas, incluso antes de la era de Napoleón. No obstante, señaló que la conjunción de las culturas empezó después de la invasión de Napoleón a Rusia en 1812, la cual fue llamada la Guerra Patria. “Pero al mismo tiempo, la inteligencia en Rusia, es decir, la clase social que era la más alta, no solamente hablaba el francés, sino que también era el segundo idioma de aquella gente. Por eso el cine francés apareció en Rusia como si fuera el segundo idioma franco ruso en Rusia”, reseñó. En cuanto a los primeros productores que aparecieron, Nemov observó que eran personas con apellidos ilustres que incluso ahora subsisten en sus descendientes. Asimismo, hizo mención al desarrollo del cine ruso, en donde había mucha gente interesada que intervenía en ese arte, pero que a su vez fue allí cuando se produjo la Revolución de Octubre. “A mi entender, en cualquier arte, especialmente en el cine y en el teatro, siempre debe haber un conflicto, porque sin ese conflicto no puede haber una obra de arte”, manifestó. De esta manera, señaló que hay solamente dos temas principales que mueven el cine y las producciones de teatro: el amor y el crimen. Tomó como ejemplo a Medea de Sófocles, en donde ella mata a sus hijos solo para irritar a su marido.

Seguidamente, indicó que en los años ’20 en Rusia se dio la aparición del cine mudo, el cual se desarrolló hasta el año ’35 aproximadamente. Asimismo, a partir de los años ’30, aparecieron las películas habladas, en donde aparece un tema criminal desde el punto de vista del Gobierno. “Cuando se produjo la Revolución Socialista de Octubre los países adyacentes a Rusia no estaban de acuerdo con aquella revolución, y por eso se cerró el país, para que desde afuera no hubiese influencia que perjudicara la formación del nuevo ser socialista soviético”, evocó. Mientras tanto, el cine progresaba, debido a que de todas las artes el cine era la más importante. Así, remarcó que la gente que trabajaba para el cine estaba exigida por el Gobierno, quien era el que pagaba los honorarios y daba el dinero para las producciones, para que reflejara lo que el Gobierno quisiera. “Cualquier otra opinión que fuera contraria al Estado Soviético estaba muy censurada. Cualquier arte o cualquier idea contraria estaban fuertemente censurados”, concluyó.

“A mi entender, en cualquier arte, especialmente en el cine y en el teatro, siempre debe haber un conflicto, porque sin ese conflicto no puede haber una obra de arte”, manifestó Anatoli Nemov.