Ciclo de charlas-debate sobre conflicto, salud y valores. Cómo dialogar con el dogma

• Notas

El Seminario Permanente de Investigación “Remo F. Entelman: del objeto al sistema” organizó el 19 de agosto pasado en el Instituto de Investigaciones Jurídicas y Sociales "Ambrosio L. Gioja" la charla-debate "Cómo dialogar con el dogma", a cargo de Elian Pregno.

La presentación fue realizada por Héctor R. Sandler, director del seminario, quien analizando la historia argentina concluyó que el progreso de un país es inversamente proporcional a la cantidad de leyes que dicte. “Estamos sufriendo, hace mucho más de medio siglo, una inflación legislativa”, sostuvo. Así, afirmó que cuando se vive en esa selva de leyes, donde no se visualiza lo que es Derecho, ocurre el caso de Pregno: siendo becado por una universidad extranjera, no puede salir porque la AFIP no se lo autoriza. “La experiencia que él ha vivido debe ser conocida pero, además, masticada y reflexionada”, expresó.

Seguidamente, Rubén A. Calcaterra indicó: “El tema de hoy es muy importante para lo que llamamos la conflictología moderna. El tema de los valores tiene una ubicación muy clara dentro de la teoría del conflicto que desarrolló Remo Entelman como uno de los tipos o metas que pueden perseguir los autores del conflicto, más precisamente las metas u objetivos que él denominó trascendentes”. En este sentido, en los objetivos trascendentes, el valor mismo está puesto como objetivo porque no se divisa que esté anexo a un objeto tangible ni divisible. Además, Calcaterra manifestó que al incorporar la noción de estructura en la concepción de valor, la axiología tiende un puente que permite integrar el concepto filosófico con la vida social.

Acto seguido, Elian Pregno aseveró que cuando comenzó a pensar en un tema para abordar desde la conflictología, inmediatamente consideró el caso testigo Albarracini, el cual llegó a la Corte Suprema de Justicia de la Nación en el año 2012. “Albarricini tuvo un inconveniente a la hora de descorrer obstáculos para garantizarse el ejercicio de un derecho constitucional como es profesar libremente el culto, incluyendo en ese derecho, el rechazo de un acto médico, el rechazo de una transfusión sanguínea, estando comprometida la vida humana”, describió. El orador expresó que la tensión entre el derecho natural y el derecho positivo es histórica e inmemorial. Por otra parte, entendió a lo jurídico como un saber práctico que enlaza facticidades y normatividades articuladas en torno al lenguaje, pero reconociendo en la normatividad una bifurcación, atendiendo a normas que reconocen una fuente formal y reconociendo la influencia de normas que no tienen fuente formal, pero que a la hora de explicar el funcionamiento de la juridicidad ejercen una influencia igual o mayor. “¿A dónde vamos a poner los valores? ¿Vamos a construir una noción de Derecho capaz de comprender a los valores o los vamos a quitar afuera?”, se preguntó. De esta manera, tomando a Kelsen, Pregno consideró que los valores son subjetivos, y este fue el argumento que Kelsen esgrimió para dejarlos fuera de la Teoría Pura. “Yo comparto la idea de la subjetividad (…) El tema es que con este argumento Auschwitz me queda afuera también, y no da igual a mi modo de ver, por eso soy un subjetivista, Auschwitz que no Auschwitz. En este sentido, reconozco a la juridicidad como un enlace de facticidades y de normatividades, incluyendo en las normatividades no solo las que tienen fuente formal sino también a las que tensionan hacia el mundo de los valores”, puntualizó Pregno.

Por otro lado, el disertante expresó que también hay dificultades para comprender la noción de salud. “Fuera de este derrotero histórico, lo único que se ha mantenido constante es la idea de equilibrio”, destacó. Asimismo, mencionó la noción de salud como un completo estado de bienestar biopsicosocial y no solo la mera ausencia de enfermedad. “Ya salud y enfermedad no son antónimos, pareciera ser que la idea de salud es bastante más amplia que la enfermedad. Pero el primer problema es la autorreferencialidad de la noción de salud, este completo estado de ‘bienestar’ marca un reenvío hacia el interior del individuo, tantos individuos como dispuestos haya a responder la pregunta '¿estás bien?'”, remarcó. El segundo problema es que no hay forma de contener a un colectivo que avance hacia el Parlamento. “Un grupo de personas nucleadas en torno a una patología se roba una ley, y hemos reconocido a la enfermedad como pasaporte de derechos. Hay que poner bajo la lupa esta comprensión del Derecho”, estimó.

Con relación al caso testigo, recordó que uno de los fundamentos para el rechazo de las transfusiones sanguíneas es un pasaje de la Biblia. “De una interpretación literal de la Sagrada Escritura, ellos interpretan que Dios les ha prohibido aceptar y donar sangre, porque deben llevarse tanta sangre como han traído”, describió. La pregunta planteada es cómo se dialoga con esto, teniendo en cuenta que el autor de esta prohibición es Dios. Pregno recordó que Albarricini se dirigió al escribano público y declaró que si algún día lo necesita, no quiere una transfusión sanguínea en razón del artículo 14 y 19 de la Constitución Nacional. El procurador, por su parte, no comprendió cual es el objeto de una directiva anticipada. “La persona se tomó el trabajo de dejar dicho lo que quiere para cuando no lo pueda decir. Si uno lo va a impugnar a eso que dijo porque no sabe si ahora quiere decirlo, comprenderán que se vuelve por lo menos poco operativo”, señaló. En este caso, se dio el presupuesto que torna operativa la cláusula que incluye una directiva anticipada. Pregno sostuvo que hay muchos casos de consentimiento diferidos, como el testamento. El orador se cuestionó además acerca de quién es el legitimado para consentir una decisión de última voluntad cuando el paciente no puede expresarse.

Luego, se dio paso a un interesante debate sobre el tema.

“Reconozco a la juridicidad como un enlace de facticidades y de normatividades, incluyendo en las normatividades no solo las que tienen fuente formal sino también a las que tensionan hacia el mundo de los valores”, puntualizó Elian Pregno.